En la vorágine del Draft de la NBA de 2024, los Houston Rockets pusieron sus ojos en el talentoso base Reed Sheppard, proveniente de la Universidad de Kentucky. Con un juego dinámico y una habilidad innata para leer la cancha, Sheppard rápidamente se convirtió en el centro de atención de varios equipos de la liga.
Los Atlanta Hawks contemplaban la posibilidad de seleccionarlo como primera elección, buscando reforzar su backcourt. Mientras tanto, los San Antonio Spurs también mostraron interés en el joven talento, contando con las selecciones número 4 y 8 en el draft. Rumores de posibles intercambios entre los Hawks y los Rockets también surgieron, sin embargo, esta vez Houston no tuvo que recurrir a un plan alternativo como en años anteriores.
«Simplemente estuvo constante», expresó el entrenador en jefe de la Liga de Verano de los Rockets, Garrett Jackson, sobre Sheppard luego de su destacada actuación en el primer juego del torneo. «Dejamos que el juego viniera a él, haciendo las lecturas correctas. Cada vez que podíamos ponerlo a jugar pick-and-roll en espacios abiertos, especialmente en la parte alta de la cancha, él era capaz de hacer lecturas, atacar a los grandes, detenerse y tirar».
Los elogios para Sheppard no se hicieron esperar, con comparaciones con estrellas actuales de la liga. «Esos tipos de instintos me recuerdan a Fred (VanVleet)», señaló Jackson. «Fred no es el jugador más alto, pero es muy inteligente. Defensivamente, tiene las manos rápidas y sabe cómo saltar de carril. Reed es muy similar».
La expectativa en torno a Reed Sheppard y su potencial en la NBA sigue en aumento, con los Houston Rockets confiando en haber encontrado una pieza clave para el futuro de la franquicia. Su habilidad para liderar el juego y tomar decisiones certeras en la cancha lo posicionan como un prospecto emocionante para seguir en la próxima temporada.