En Iowa City, el baloncesto universitario tiene un representante de primera clase en la figura de Caitlyn Clark, considerada por muchos como la mejor jugadora de baloncesto universitario en la actualidad. Pero no solo en el ámbito femenino se destacan los Hawkeyes, también han producido jugadores históricos en el lado masculino del juego. Durante ciertos momentos de su historia, Iowa ha sido poseedora de algunos de los mejores talentos del baloncesto universitario a nivel nacional. Aunque quizás no alcancen el mismo nivel de prestigio que estados como Indiana o Illinois, los Hawkeyes han tenido su cuota de éxito en la memoria reciente.
Uno de los momentos más notables en la historia del baloncesto en Iowa fue a finales de la década de 1950, cuando lograron llegar a la final four dos veces consecutivas. Este éxito estaba encabezado por un grupo de jugadores conocidos como los «Cinco Fabulosos», quienes dejaron una huella imborrable en la historia del baloncesto en Iowa. A lo largo de los años, el programa ha logrado resurgir, manteniéndose siempre en la contienda incluso en sus momentos más difíciles. Esto se ha mantenido durante la era actual del equipo bajo la dirección del entrenador Fran McCaffrey.
En cuanto a la alineación titular de todos los tiempos de los Hawkeyes, uno de los nombres que destaca es el de Ronnie Lester, considerado por muchos como uno de los mejores bases en la historia de Iowa. Como menciona un fanático de los Hawkeyes, «Siempre hay que tener un base, y ha habido tiradores muy fuertes en la historia de Iowa, pero Ronnie Lester es el mejor de todos los tiempos de Iowa en el manejo del balón». Lester demostró una extraordinaria visión de la cancha y lideró al equipo hacia el Campeonato Big Ten en 1980, así como a una aparición en la Final Four esa misma temporada.
BJ Armstrong es otro jugador emblemático en la historia del baloncesto de Iowa, un base nacido para lanzar la pelota, según se describe por algunos. Aunque no alcanzó el estatus de All-Big Ten, Armstrong dejó su huella en el baloncesto de Iowa al convertirse en el líder de asistencias de todos los tiempos de la escuela. En 130 partidos con los Hawkeyes, anotó más de 1.700 puntos y demostró su valía en la cancha con su excelente capacidad para repartir pases.
En resumen, el baloncesto en Iowa ha sido testigo de grandes momentos a lo largo de su historia, con jugadores como Ronnie Lester y BJ Armstrong dejando un legado duradero en la escuela. A medida que la tradición continúa y nuevas estrellas emergen, la historia del baloncesto de Iowa sigue evolucionando, manteniendo vivo el espíritu de competencia y pasión por el juego.