Los Houston Rockets han brillado en la noche del draft al llevarse a un grupo de novatos impresionantes, como lo han hecho los Warriors o los Lakers en temporadas anteriores. A pesar de su talento, cada jugador novato debe enfrentarse a preguntas sobre su juego y desarrollo durante la temporada 2024-2025 de la NBA.
Reed Sheppard, base de Kentucky, fue seleccionado en el tercer puesto por los Rockets. Un jugador que ha impresionado a muchos con su habilidad para crear jugadas y su increíble capacidad de tiro. A pesar de su estatura de 1.88 metros, Sheppard también destaca en defensa. Durante la Liga de Verano, demostró su versatilidad y su alto nivel intelectual de baloncesto, anotando consistentemente contra todo tipo de oponentes. Sus habilidades en cancha han quedado demostradas, pero aún debe responder a las cuestiones planteadas sobre su juego y desarrollo.
Por otro lado, N’Faly Dante, pívot de Oregon, firmó un contrato de dos vías con los Rockets. Aunque no fue seleccionado en el draft, Dante destaca en defensa y en el juego de rebotes gracias a su tamaño y capacidad atlética. Durante la Liga de Verano su desempeño no fue el mejor, pero sí demostró ser un jugador con potencial. La gran incógnita que Dante debe resolver es si podrá mejorar su juego ofensivo. Su falta de habilidades ofensivas diversificadas limita su juego, y necesita trabajar en convertirse en un mejor pasador y tirador para aumentar su valor como jugador.
En cuanto a Jack McVeigh, alero australiano de 28 años, firmó un contrato de dos vías con los Rockets. Con experiencia internacional en los Juegos Olímpicos de París 2024, McVeigh destaca por su capacidad para anotar en los tres niveles y por ser un excelente tirador de tres puntos. A pesar de su talento, la pregunta que se plantea es si podrá jugar lo suficientemente bien como para ganarse un contrato estándar en la NBA. Dada su edad, necesita producir a un nivel aceptable para permanecer en la liga y demostrar que merece estar ahí.
En resumen, los Rockets han sumado a un grupo de novatos con mucho potencial, pero que deberán responder a las interrogantes planteadas sobre su juego y desarrollo para poder destacar en la NBA. Cada uno tiene su desafío por delante para demostrar su valía y consolidarse en la liga.