La estrella de los Minnesota Timberwolves, Anthony Edwards, ha dado de qué hablar en el mundo del baloncesto al rechazar la oportunidad de representar al equipo de Estados Unidos en su próximo gran torneo. A sus 22 años, este joven talento recientemente formó parte del equipo masculino de baloncesto de EE. UU. que brilló en los Juegos Olímpicos de Verano de 2024 en París, llevándose a casa la medalla de oro tras ganar los seis partidos del torneo y vencer a Francia en la final.
Edwards, quien ya había representado a EE. UU. en la Copa Mundial de Baloncesto FIBA 2023 en Filipinas, ha decidido no unirse al equipo para el torneo que se celebrará en 2027. A pesar de haber alcanzado la gloria olímpica en dos veranos consecutivos, el joven jugador parece tener otros planes para su carrera.
En una entrevista con Joe Vardon de The Athletic, el escolta de 1,93 metros dejó en claro su postura sobre su participación futura en torneos internacionales, lo cual ha sorprendido a muchos en la comunidad del baloncesto. Su negativa a unirse al equipo estadounidense en la Copa Mundial FIBA supone un paso atrás en la posibilidad de completar un impresionante palmarés como jugador de baloncesto.
La Copa Mundial FIBA 2027 se avecina, y Estados Unidos buscará redimirse tras no haber logrado el éxito en las últimas ediciones del torneo. Con el equipo estadounidense ubicado en el séptimo lugar en la Copa Mundial FIBA 2019 en China, la presión está en el entrenador Gregg Popovich y los jugadores para recuperar la corona que ganaron por última vez en 2014.
Edwards, quien expresó su regocijo por haber formado parte del equipo de EE. UU. en los Juegos Olímpicos de París 2024, tuvo una destacada participación en el torneo. Su mejor actuación fue contra Puerto Rico, donde anotó 26 puntos con un impresionante 11 de 15 tiros de campo. Además, tuvo la oportunidad de compartir momentos con su ídolo y ahora compañero de equipo en la NBA, Kevin Durant de los Phoenix Suns.
Con su renuncia a participar en el próximo gran torneo internacional, Anthony Edwards ha dejado a todos con la incertidumbre sobre su futuro en el equipo de Estados Unidos y su carrera en el baloncesto de élite.