En la temporada pasada, Donte DiVincenzo brilló con los New York Knicks. Promedió 15.5 puntos, 3.7 rebotes y 2.7 asistencias con un impresionante 44.3% en tiros de campo. A pesar de tener un alto uso de la pelota, DiVincenzo logró su mejor temporada con los «Nova Knicks». Después del receso del Juego de las Estrellas, promediaba más de 20 puntos por partido como el segundo máximo anotador, asumiendo cargas adicionales cuando los Knicks perdieron a jugadores clave.
Según HoopsHype, la clasificación de Donte DiVincenzo como el 16° mejor escolta de la NBA es irrespetuosa. A pesar de su éxito, ¿realmente merece estar tan bajo en la lista? Malik Monk, quien se encuentra en el puesto 14, es considerado un rival en la carrera por el premio al Sexto Hombre del Año, pero DiVincenzo es superior en varios aspectos. Es un tirador más efectivo y un defensor destacado, con números que respaldan su valía.
En cuanto a Bradley Beal, situado en el puesto 12, su habilidad es indudable, pero su disponibilidad ha sido cuestionada. DiVincenzo ha demostrado ser más consistente en cuanto a presencia en la cancha, lo que le otorga una ventaja sobre el jugador de los Suns. En definitiva, las estadísticas colocan a DiVincenzo por encima de jugadores reconocidos, como Beal, y relegarlo al puesto 16 es una falta de respeto a su talento y contribución al equipo.
A pesar de su papel en la banca, DiVincenzo merece ser considerado entre los mejores escoltas de la liga. Su capacidad como tirador y su habilidad defensiva lo destacan del resto. Es injusto no valorar su impacto en la temporada pasada y subestimar su talento al etiquetarlo como un escolta promedio, cuando claramente está por encima de la media. Lo que DiVincenzo ha logrado en la cancha habla por sí mismo y merece un reconocimiento acorde a su desempeño.