A pesar del dominio del equipo de Estados Unidos sobre Serbia en la fase de grupos de los Juegos Olímpicos de París, Joel Embiid sigue siendo objeto de críticas. A pesar de jugar solo 11 minutos, Embiid logró cuatro puntos, dos rebotes, y un bloqueo al encestar 2 de 5 tiros de campo, con el único plus-minus negativo del equipo de Estados Unidos (-8).
En un gesto que recuerda al uso que hizo Doc Rivers, entrenador de los Milwaukee Bucks, del escolta Ray Allen durante su etapa con los Boston Celtics, Embiid a menudo se encuentra alrededor del arco de tres puntos, esperando pases que nunca llegan. Se podría argumentar que, debido a las necesidades del equipo de EE. UU. de generar movimiento de balón, no es necesariamente un problema perder la primera oportunidad abierta. Sin embargo, el propósito del movimiento de balón es mejorar la calidad de los intentos de tiro y dinamizar la ofensiva involucrando a múltiples jugadores. Por lo tanto, cuando Embiid se queda fuera de la jugada con las manos extendidas en el contraataque, es contraproducente.
En las últimas cuatro temporadas, el MVP de la NBA de 2023 ha tenido un 36,4 por ciento de acierto en sus triples. Su eficiencia desde la distancia se asemeja a la de Nikola Jokic, el pívot de los Denver Nuggets. Embiid acertó el 38,8 por ciento de sus triples la temporada pasada, por lo que es contradictorio no utilizar su habilidad más allá del arco.
Además, a pesar de medir 2,13 metros y pesar 137 kilos, el equipo de Estados Unidos no ha buscado constantemente a Embiid cerca del aro. En la NBA, Embiid no es un corredor de aro tradicional, sino que juega más como un ala-pívot en ataque. Sin embargo, la temporada pasada, Embiid promedió 5,0 posesiones como hombre de bloqueo y continuación, anotando 1,11 puntos por posesión en estos intentos.
En resumen, la clave para mejorar el rendimiento de Joel Embiid en el equipo de Estados Unidos es utilizar al máximo sus habilidades en el perímetro y cerca del aro, aprovechando su tamaño y habilidades ofensivas para dinamizar la ofensiva y potenciar el juego del equipo en general. Es necesario encontrar la manera de involucrarlo más en el juego y optimizar su impacto en la cancha para lograr un mejor desempeño en futuros encuentros. ¡Veremos si el equipo logra resolver el problema y saca lo mejor de Embiid en lo que resta de los Juegos Olímpicos de París!